
Aquel lugar era especial, aunque de eso me di cuenta más tarde. La primera vez que lo vi, pensé que ahí no podría vivir. El apartamento no tenía calefacción, ni aire acondicionado, ni persianas, ni ascensor, se accedía a la vivienda por unas inestables escaleras exteriores, las ventanas no aislaban bien y el suelo parecía sacado de un mosaico romano. Lo que me gustó fue la chimenea en el comedor y las vistas. Las vistas si me cautivaron. Eran de ensueño.
El lugar construido a lo alto de una calle en pendiente, era pequeño, pero al abrir la puerta principal un salón con cocina americana daba la bienvenida a una gran terraza con vistas al mar y a la verde urbanización. Podíamos ver el mar desde todas las estancias. En la cama, desde el sofá, en el estudio, cocinando, incluso desde el baño. Aquel hogar me transformó de verdad y me permitió descansar.
Esa noche de verano habíamos invitado a Emily y a Alex a cenar.
Por la mañana fuimos a comprar en el mercado y Victoria me regaló un puñado de albahaca fresca de su huerto. Emily era vegana así que se nos ocurrió preparar una ensalada caprese con aguacate, una focaccia casera de cebolla y unos fusilli bucati con pesto vegano a la Genovese junto a un afrutado sauvignon blanc.
– ¡Acaban de llegar! Están aparcando – dije nerviosa después de mirar el móvil – Ya están encendidas las velas en la terraza y en la chimenea – me respondió una voz calmada. A los pocos minutos escuché pasos en la escalera de metal y el timbre sonó. La casa se llenó de abrazos, risas y el sonido de un golpeteo a madera que hacía Menta con su cola, alegre por las visitas. – ¡Qué pasada de vistas! – dijo Alex. – Y qué mesa tan bonita! – añadió ilusionada. – Emily se acercó sigilosa a la cocina y al ver el pesto me dio un beso en la mejilla. – It’s vegan – le sonreí. – Ella me miró, me devolvió la sonrisa y me preguntó con un gracioso español mientras abría la puerta de la nevera – ¿Tener un cerveza?
Rimmel de Francesco de Gregori sonaba de fondo. – ¡Tutti a tavola! – grité mientras colocaba la ensalada en la mesa. – Alex acarició una planta de la terraza y la atmósfera se llenó de un delicioso aroma a menta fresca. La luna creaba un destello en el mar y toda la urbanización quedó bañada por una luz mágica. Un cálida noche a la luz de las velas que siempre recordaré con cariño en uno de los mejores lugares que he vivido.

INGREDIENTES
20 g de albahaca
80 g de nueces
20 g de piñones
1 diente de ajo
2 cdas de levadura nutricional
aceite de oliva suave 0,4ºC
1/2 cdta de sal pura sin refinar
1/2 cdta de edulcorante (opcional)
1. Quítale la piel y el nervio al diente de ajo. Reserva.
2. Con la ayuda de una batidora o picadora, tritura las hojas de albahaca con un poco de aceite de oliva. No te pases de aceite. Poco. Solo para que la albahaca libere la clorofila.
3. Cuando veas la mezcla verde intensa, incorpora el resto de ingredientes y tritura hasta conseguir una mezcla homogénea sin llegar a triturar del todo. No queremos una salsa, sino un pesto con textura. Listo!
Con el objetivo de hacer la receta más accesible, he añadido 80% de nueces y 20% piñones, pero se puede hacer 100% con nueces (que es como normalmente la hago) u otros frutos secos que tengas a mano (avellanas, nueces pecanas).
Puedes guardar el pesto en la nevera en un recipiente hermético una semana. Para alargar la duración un poco más, hay que escaldar (blanquear) las hojas de albahaca en agua hirviendo 3 segundos y pasarlas rápidamente a agua muy fría con hielo para cortar la cocción. La clorofila se fija y no se oxida tan rápido. El blanqueo también se hace para obtener un pesto de color verde brillante intenso y de este modo puede durar hasta 2 semanas en la nevera.
Claudia.
Maria Jesús
Claudia, que ilusión que hayas retomado el blog. Busqué durante mucho tiempo Cocina y Divina pero no lo encontré. Muchas gracias por republicar las recetas. Como te dije por mail éste pesto era espectacular. Que feliz de volver a tener todos los ingredientes disponibles! Un beso guapa!
Claudia
Maria JesúsDe nada María Jesús! Espero que la disfrutes!
Uri
¡Muy rico! Ha quedado fabuloso. Como el auténtico italiano. ¡¡Gracias!!
Claudia
UriUri, me alegra que te haya gustado.
Montse
Hola Claudia,
La verdad que el pesto es un condimento muy conocido por la gran mayoría y sobre todo te soluciona muchos platos. Hace unos días preparé tu receta y debo decir que me encantó! Además dura mucho si lo conservas en la nevera. Una receta fantástica, la repetiré. Gracias.
Claudia
MontseGràcies per el comentari.